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Nacida hace 28 años en Madrid, Verónica es licenciada en Química y actualmente está terminando el doctorado en Bioquímica y Biología Molecular en un centro del CSIC en Madrid. Siempre ha estado interesada en la lectura, aunque nunca pensó escribir una novela. A pesar de haberse lanzado en la novela romántica, su autora favorita es Mary Higgins Clark, la reina del suspense. En un futuro le gustaría intentar escribir algo de este género pero por ahora continuará en la romántica. Su libro favorito es La Sonrisa Etrusca de José Luis Sampedro. Fue recomendado por su profesor de Ética en el instituto y desde entonces no ha encontrado ningún otro libro que lo supere.


Entre sus aficiones, además de la lectura, se encuentran la música y viajar. Ha visitado distintas ciudades de Europa, también ha viajado a Egipto y a Brasil. Pero su ciudad favorita es, sin duda, Londres. Uno de sus destinos deseados es Australia. Ambas cosas se ven reflejadas en su primera novela Sólo una sonrisa.


Como curiosidad está preparando la segunda parte de Sólo una sonrisa e intentará sorprender a los lectores que confiaron en ella.

Con Sólo una sonrisa participó en el IV Premio Creación Literaria Bubok, en el año 2012, aunque la novela no fue seleccionada. En el 2013 ha participado en el I Certamen Literario Divalentis con el micro-relato Bajo la luz de la luna. Esta vez sí fue seleccionada para formar parte del libro 150 Rosas de la editorial Divalentis.

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